La infancia y la vejez se dan la mano en este hermoso texto rimado.

    Una historia que celebra la amistad entre un niño y su vecino, un anciano aparentemente extraño y gruñón, que invita a crear puentes de comunicación y afecto intergeneracional.

    El aumento de la sabiduría y las experiencias de vida relacionadas con la edad es un impulso para dar a los niños de una manera significativa. El envejecimiento de la población tiene cualidades distintivas para satisfacer las necesidades de los jóvenes. Los adultos mayores son excepcionalmente adecuados para satisfacer estas necesidades, en parte porque acogen una actividad y compromiso productivos y significativos. Buscan, y necesitan, un propósito en sus vidas. Los adultos también se benefician, experimentando satisfacción emocional en las relaciones con los jóvenes. Una forma de lograr ese contacto es a través del servicio voluntario, que se asocia con una mejor salud física y rendimiento cognitivo para las personas mayores. Desde una perspectiva social, estas interacciones son positivas, también.